Con el fin de rescatar el tradicional juego del trompo, Leonardo Pérez López, realiza exhibiciones en lugares concurridos de gente, en los municipios de Calpulalpan y Nanacamilpa  

Manuel MORALES

Los juegos tradicionales mexicanos fomentan la convivencia familiar, pero con el paso del tiempo desaparecieron de las calles los tradicionales trompos de madera con punta de tornillo, los baleros y las canicas, por ello ofrece exhibiciones en lugares concurridos de gente, para que conozcan los trucos del trompo y se interesen en jugarlo, afirmó conocido vecino del municipio de Calpulalpan.

Con 59 años de edad y cinco años de haber retomado el juego del trompo, Leonardo Pérez López, dedica parte de su tiempo en ofrecer demostración de diferentes formas de hacer girar el trompo, en centros de avistamiento de luciérnagas de Calpulalpan y Nanacamilpa, así como en jardines púbicos y lugares concurridos de gente.

Pérez López, comentó que comenzó a girar el trompo a la edad de ocho años y al cumplir 13 años dominaba tres trucos, pero dejó de jugar por razones de estudio y trabajo, por lo que hace cinco años retomó esta actividad y actualmente domina 75 trucos, como la uña, el dedo, la pesa y el columpio, entre otros.

Detalló que busca dar exhibiciones en instituciones educativas públicas de la región, con el fin de motivar a niños para que practiquen este juego, además de que si en alguna escuela, ya sea por parte de padres de familia o directivos, tienen interés en que los menores aprendan a jugar, está en la mejor disposición de impartir clases de trompo.

Agregó que no se trata de un negocio sino de rescatar este juego tradicional, para que los menores lo jueguen entre familia y vecinos como se hacía hace varias décadas, por lo que si alguna persona se interesa en esta actividad pueden solicitar informes en la reparadora de calzado Terry, en Calpulalpan.

El jugador del trompo, Leonardo Pérez López, hace uso de habilidad para realizar diferentes trucos con el trompo de madera

Manuel MORALES