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*Una por una, las personas pasaron a la mesa para recibir la ceniza, la tomaron con sus manos y con sus dedos la esparcieron sobre su cabeza en signo de vivir plenamente la Cuaresma
El Miércoles de Ceniza marca el inició de la Cuaresma, pues inician los 40 días en los que la iglesia llama a los fieles católicos a la conversión y a prepararse para vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo en la Semana Santa, que se refiere a las últimas horas que Jesús paso en la tierra, pero este 17 de febrero es una fecha muy especial para millones de católicos alrededor del mundo y de México, ya que se vivió de manera diferente debido a la pandemia generada por Covid-19.
Pese a las restricciones que emite el Consejo Estatal de Salud para contener contagios de Covid-19, decenas de personas que profesan la religión católica en Calpulalpan, acudieron a los templos a la imposición de ceniza, como fue el caso de la Parroquia de San Antonio de Padua, donde se pudo apreciar que no se permitió la aglomeración de gente y cómo cada feligrés se impuso la ceniza para evitar contagios.
Con el fin de proteger la salud de las personas, sacerdotes franciscanos colocaron vallas en el acceso al templo para evitar la entrada a los feligreses, quienes desde afuera dieron gracias a Dios y pidieron por la salud de las personas, además de que en el transcurso del día se pudieron escuchar cantos penitenciales propios al tiempo de la Cuaresma, en tanto la gente recibió la ceniza en el portal que se ubica en el atrio del inmueble.
En este sentido, Fray José Luis Ramírez Manes, sacerdote y religioso franciscano, dijo que cada año al iniciar el tiempo de Cuaresma, un signo que tienen como cristianos es signarse con la ceniza, por lo que el Papa Francisco, por la situación de la pandemia, pidió que celebren la Santa Eucaristía por la mañana.
Detalló que ante las costumbres del pueblo y para evitar un contagio masivo de Covid-19 al imponer con las manos la ceniza, pidieron a las personas que presenten la palma de su mano, les colocan tantita ceniza y ellos la imponen en signo de conversión de arrepentimiento, para que los lleve a encontrase realmente en este tiempo de Cuaresma durante los 40 días que tienen para prepararse.
Afirmó que “ellos mismos la toman con sus manos, con sus dedos esparcen la ceniza sobre su cabeza en signo de vivir plenamente la Cuaresma, aunque, la pandemia sigue haciendo grades destrozos y como el año pasado todo será a puerta cerrada”.
Expresó que “como católicos y cristianos, nuestra oración es por las personas, pedimos y lamentamos mucho por quienes han perdido un familiar a consecuencia de la pandemia, pedimos salud al señor y a vivir nuestra fe en esta nueva modalidad que se va generando en este tiempo”.
Exhortó a la población a cuidarse, lavarse las manos constantemente como lo recomiendan las autoridades de salud, así como “tener los cuidados pertinentes para evitar el contagio que tanto daño está haciendo a la humanidad y principalmente a nuestro pueblo de México”.