El cronista de Calpulalpan, Alejandro Martínez Contraes, afirmó que “ni en plena revolución mexicana, ni en la muerte del General Porfirio Bonilla, registrada en Calpulalpan, el 13 de junio de 1915, fue suspendida la Feria de San Antonio de Padua

Una vez que el representante de la parroquia de San Antonio de Padua, Fray Domingo García Martínez, dio a conocer que no habrá feria patronal, el cronista Alejandro Martínez Conteras, lamentó que se suspenda este festejo, pues ni en plena revolución mexicana, ni en la muerte del General Porfirio Bonilla, quien perdió la vida en Calpulalpan, el 13 de junio de 1915, no fue suspendida la feria patronal.

Afirmó que durante estos hechos históricos, peregrinos procedentes de la sierra norte de Puebla no dejaron de visitar a San Antonio de Padua, por lo que “hoy estamos a 10 de junio y pienso que vendrán, aun cuando no puedan ingresar a la iglesia”.

Detalló que aun cuando no existe un dato preciso del inicio de esta festividad religiosa, por investigaciones que hizo en los libros del archivo de la iglesia, que le permitieron consultar, se desprende que el festejo a San Antonio de Padua inicio a finales del siglo XVIII, es decir, algo así como el año de 1780, por lo que es una tradición de al menos 240 años.

Comentó que la suspensión de la feria es un caso excepcional, ya que “ha habido muchos cambios inesperados, pero la gente no lo siente tanto como nosotros los viejos, que esperábamos que protestaran las clases dominantes, pero nadie dijo nada y solo se suspendió”.

Mencionó que los pobladores deberían haberse presentado ante el presidente municipal, no en forma de pelito sino para hacerle ver las necesidades que tiene el municipio de movimientos como la feria, principalmente en el ramo comercial.

Expresó que en la comuna hay cambios que parten del modo de vestir, de comer y del trato que se da en las familias entre sí, por lo que ya no es lo mismo que a principios de siglo y estos cambios no sabe si son para bien o para mal.

Dijo que se pregunta que será el 13 de junio de la clásica visita que hacen las casaderas a San Antonio, ya que “por décadas, las casaderas visitan la iglesia el 13 de junio para pedir a San Antonio que les permitiera casarse y para esto tienen que llevar 13 monedas, pero no de su bolso, pues tienen que ser regaladas por 13 personas distintas para que les conceda esta gracia…esperamos que por lo menos esta tradición permanezca”.